sábado, 24 de mayo de 2008

viernes, 23 de mayo de 2008

FELIZ VIAJE Y PRONTO REGRESO!!!!


Madres gracias por su presencia en estos días

tan especiales para la Institución

les deseamos que tengan un buen viaje.

Esperamos tenerlas pronto con nosotros!
Hasta entonces, las vamos a extrañar Muchisimo!!!

Dios las Bendiga!!!!


continuamos...


"Evangelizando con María a la Luz de la Eucaristía"


EUCARISTIA GENERAL

jueves, 22 de mayo de 2008

CELEBRACIÓN DEL CORPUS CHRISTY



PALABRAS DE LA MADRE PROVINCIAL:
MADRE HERMINIA SIERRA

ESTAMOS DE JUBILO

En la Unidad Educativa Arquidiocesana Rafael Arias Blanco, nos encontramos felices, celebrando por tener entre nosotros a la Madre Provincial, Madre Herminia Sierra, quien con su alegría, cercania, espiritualidad y fraternidad nos ha cautivado en estos cortos días. Pedimos a Dios la siga Bendiciendo y llenando de innumerables dones para que continúe compartiendo con todos aquellos que a ella se acercan.

GRACIAS MADRE POR ENSEÑARNOS QUE AMAR ES PREFERIR...

SERENATA DE BIENVENIDA

CORPUS CHRISTI


El Sacramento de la Sagrada Eucaristía




La Eucaristía es el Sacramento que contiene verdaderamente el Cuerpo y Sangre de Jesucristo, juntamente con su Alma y Divinidad, toda la Persona de Cristo vivo y glorioso, bajo las apariencias de pan y vino.

El concilio de Trento define claramente esta verdad, fundamental para la vivencia y adoración de Cristo: " En el Santísimo Sacramento de la Eucaristía se contiene verdadera, real y sustancialmente el Cuerpo y Sangre de nuestro Señor Jesucristo, juntamente con su Alma y Divinidad. En realidad Cristo íntegramente."

Como católicos, creemos que Jesucristo está personalmente presente en el altar siempre que haya una hostia consagrada en el sagrario. Es el mismo Jesucristo, verdadero Dios y verdadero Hombre, que andaba por los caminos de Galilea y Judea. Creemos que El viene ahora como nuestro huésped personal, cada vez que recibimos la Santa Comunión.

La Eucaristía es uno de los siete sacramentos instituidos por Cristo para que participemos de la vida de Dios. Es el mayor de todos los sacramentos, porque contiene a Cristo mismo, el Autor Divino de los Sacramentos.
Hay tres aspectos o momentos en la Eucaristía.

El primero se dice real Presencia de Cristo en el altar, siempre que haya una hostia consagrada en el Sagrario. Segundo, la Eucaristía como sacrificio, que es la Misa. Y tercero, la Santa Comunión.

La palabra Eucaristía, derivada del griego, significa "Acción de gracias". Se aplica a este sacramento, porque nuestro Señor dio gracias a su Padre cuando la instituyó. Además, porque el Santo Sacrificio de la Misa es para nosotros el mejor medio de dar gracias a Dios por sus beneficios.

La Sagrada Eucaristía es el verdadero centro del culto católico, el corazón de la fe. Y porque creemos que el hijo de Dios está verdaderamente presente en el Sacramento del altar, construimos bellas iglesias, ricamente adornadas.

El Sacrificio de la Misa no se limita a ser mero ritual en recuerdo del sacrificio del Calvario. En él, mediante el ministerio sacerdotal, Cristo continua de forma incruente el Sacrificio de la Cruz hasta que se acabe el mundo.

La Eucaristía es también comida que nos recuerda la Ultima Cena; celebra nuestra fraternidad en Cristo y anticipa ya el banquete mesiánico del Reino de los Cielos.

Por la Eucaristía, se da Jesús mismo, Pan de Vida, en alimento a los cristianos para que sean un pueblo más grato a Dios, amándole más y al prójimo por Él.

Se reserva la Eucaristía en nuestras iglesias como ayuda poderosa para orar y servir a los demás. Reservar el Santísimo Sacramento significa que, al terminar la comunión, el Pan consagrado que sobra se coloca en el Sagrario y allí se guarda reverentemente. La Eucaristía en el Sagrario es un signo por el cual Nuestro Señor está constantemente presente en medio de su pueblo y es alimento espiritual para enfermos y moribundos.
Debemos agradecimiento, adoración y devoción a la real presencia de Cristo reservado en el Santísimo Sacramento.

Las tumbas de los mártires, las pinturas murales de las catacumbas y la costumbre de reservar el Santísimo Sacramento en las casas de los primeros cristianos durante las persecuciones, ponen de manifiesto la unidad de la fe en los primeros siglos del Cristianismo sobre la doctrina de la Eucaristía, en la cual Cristo realmente se contiene, se ofrece y se recibe. De la Eucaristía sacó fuerzas toda la Iglesia para luchar valerosamente y conseguir brillantes victorias. La Eucaristía es el centro de toda la vida sacramental, pues es de capital importancia para unir y robustecer la Iglesia.

La novena en honor del Sacramento de la Sagrada Eucaristía puede hacerse muchas veces durante el Año Litúrgico, para ahondar nuestra fe en este gran misterio de amor, centro de toda la vida sacramental de la Iglesia.



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La Palabra de Dios

"Yo soy el pan de la vida.
Vuestros padres comieron el maná en el desierto
Y murieron; éste es el pan que baja del cielo,
para que quien lo coma no muera.
Yo soy el pan vivo, bajado del cielo.
Si uno come de este pan, vivirá para siempre;
y el pan que yo le voy a dar, es mi carne por
la vida del mundo…."Si no coméis la carne
del Hijo del hombre, y no bebéis su sangre,
no tenéis vida en vosotros.

"El que come mi carne y bebe mi sangre,
tiene vida eterna, y yo lo resucitaré el ultimo día.
Porque mi carne es verdadera comida
y mi sangre verdadera bebida.
El que come mi carne y bebe mi sangre,
permanece en Mí, Y yo en él".

"Lo mismo que el Padre, que vive, me ha enviado
y yo vivo por el Padre, también el que me coma
vivirá por mí". Jn 6, 48-57

"Mientras estaban comiendo, tomo Jesús pan
y lo bendijo, lo partió y, dándoselo a sus discípulos dijo:
"Tomad, comed, éste es mi cuerpo."
Tomo luego una copa y, dadas las gracias, se la dio diciendo:
"bebed de ella todos, porque ésta es mi sangre de la Alianza,
que es derramada por muchos para el perdón de los pecados".
Mt 26, 26-28

"Hagan esto en memoria mía".
Lc 22,19


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Oración propia de la Novena

Te doy gracias, Jesús, mi Dios y Redentor, por haber venido al mundo para salvarnos; por instituir el admirable Sacramento de la Eucaristía y quedarte con nosotros hasta el fin del mundo. Te doy gracias por haber ocultado bajo las especies eucarísticas tu infinita Majestad y Hermosura, cuya contemplación hace las delicias de los ángeles. Así me inspiras confianza para acercarme al trono de tu Misericordia.

Te doy gracias, Jesús mío, porque te me das a Ti mismo en el Santísimo Sacramento y tanto lo enriqueces con el tesoro de tu amor que no hay otro don mayor para mí. Te doy gracias por haberte hecho alimento para mí y ofrecerte constantemente en sacrificio a tu eterno Padre por mi salvación.

Te doy gracias a ti Dios y Sacerdote, por ofrecerte a ti mismo como sacrificio diariamente sobre nuestros altares en adoración y homenaje a la Santísima Trinidad, perfeccionando nuestra pobre y defectuosa adoración. Te doy gracias por actualizar aquí diariamente el sacrificio de la Cruz ofrecido en el Calvario, así satisfaces por nosotros, pobres pecadores, a la Divina Justicia.

Te doy gracias, Jesús amadísimo, por haberte hecho la Víctima inapreciable que merece plenitud de favores celestiales. Despierta en mi tal confianza que desciendan gracias cada vez más abundantes y fructuosas sobre mi alma. Te vivo agradecido por ofrecerte a ti mismo en acción de gracias a Dios por todos los beneficios espirituales y temporales que Él me ha otorgado.

En unión con tu propio ofrecimiento en el santo Sacrificio de la Misa te pido esta gracia particular (mencione el favor que desea)
Concédemelo, si es conforme a tu Santa Voluntad. Quiero también recibir de Ti la gracia de perseverar en tu amor y servicio fielmente, una santa muerte y la eternidad contigo en el Cielo. Amén.


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Oración a Cristo, sumo Sacerdote.

Señor, Jesucristo, nuestro magnifico y supremo Sacerdote. Por tu Muerte y Resurrección te hemos reconocido como el Cordero sacrificial, mediador entre el Padre y nosotros mismos. Nos llamas a participar en tu Muerte y Resurrección te hemos reconocido como el Cordero sacrificial, mediador entre el Padre y nosotros mismos. Nos llamas a participar en tu Muerte y Resurrección por los sacramentos del Bautismo y Confirmación, para unirnos en el ofrecimiento del sacrificio de Ti mismo por la participación de tu Sacerdocio en la Eucaristía. Así pertenecemos a tu Reino en la tierra, haciendonos tu pueblo santo.

Señor Jesucristo, nuestro Sumo Sacerdote, concédenos tu Espíritu de Amor y Vida que nos una a ti, Sacerdote y Víctima, para que el plan de salvación para todos los pueblos se establezca dentro de nosotros.
Señor, Jesucristo, nuestro Sumo Sacerdote, concédenos tu Espíritu de Sabiduría y unión, que a todos nos unifique en tu Cuerpo Místico, la Iglesia, para ser tus testigos en el mundo.
Señor, Jesucristo, nuestro Sumo Sacerdote, tu cruz remedie nuestros males, tu Resurrección nos renueve, tu Espíritu Santo nos santifique, tu Realeza nos glorifique y nos redima tu Sacerdocio, para que podamos unirnos contigo como tu lo estas con el Padre en el Espíritu Santo.

Señor, Jesús, reúnenos a todos en tu Persona –Víctima, Sacerdote, Rey – por el banquete salvador de la Eucaristía que Tu y nosotros ofrecemos en el altar del Sacrificio, ahora y durante todos los días de nuestra peregrinación por este mundo. Cuando nos llames a tu Reino celestial, entonces podamos participar con todos los santos de tu gloria, amor y vida en unión con el Padre y el Espíritu Santo por toda la eternidad. Amén.

Oración


¡Oh Señor! Nos has regalado este sagrado Banquete en el cual recibimos a Cristo, se renueva la memoria de su Pasión, el alma se llena de gracia y nos es dada en prenda la gloria futura. Nos has dado pan del cielo que contiene en sí todo deleite.

Oremos: Oh Dios y Padre nuestro, has designado Supremo Sacerdote a Jesucristo, para tu gloria y nuestra salvación. Haz que el pueblo rescatado con su Sangre para Ti llegue a participar del poder de tu Cruz y Resurrección por la celebración de su Memorial en la Eucaristía, porque Él vive y reina contigo en el Espíritu Santo, Dios por los siglos de los siglos. Amén.

Oh Jesús Tu nos has dejado el recuerdo vivo de tu Pasión oculto bajo los velos de este Sacramento, concédenos te pedimos venerar de tal manera estos sagrados misterios de tu Cuerpo y Sangre, que podamos siempre gozar de los frutos de tu Redención. Tu que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén.

miércoles, 21 de mayo de 2008

CELEBRACIÓN DE BIENVENIDA!!!


De Colombia a Venezuela,
Ha Llegado la madre provincial,
Para impregnar nuestra tierra,
De Amor, alegría y Paz.
Bienvenidas sean Madres
A esta tierra calurosa
Donde se trabaja,
se sufre Pero también se goza.
En este año jubilar
Nos hemos acercado
A la madre fundadora
Que sus huellas nos ha dejado.
Nuestra escuela esta celebrando
La Semana Eucarística Mercedaria
Y lo estamos disfrutando
Esta alegría se contagia.
Cuando llega esta semana
Adolfo nos hace correr
Porque quiere que en la escuela
Jesucristo sea el Rey
Y si hablamos de comisiones
La de actos especiales
Ella siempre se las come
Preparando los manjares
Carmencita y la señora Ana
De carrera estuvieron ayer
Comprando los presentes
Que la mesa hoy se ven
Los maestros y maestras
De esta hermosa institución
Son alegres e inteligentes
Y tienen un gran corazón
Nuestros queridos alumnos
Son inquietos y muy osados
Han ocupado los primeros puestos
En los eventos que se han presentado
Madre sabemos que es Paisa
Por su alegría sin par
Que contagia a todos aquellos
Que se logran a usted acercar.

Nos sentimos honrados
De tenerlas hoy aquí
En nuestra humilde escuela
Compartiendo feliz.
Maestros, alumnos, hermanas
También el personal obrero
Presentamos a ustedes un poco
A este clan rochelero.
Compartimos, disfrutamos
Sonreímos y lloramos
Como una gran familia
Así lo reflejamos.
Y Con esta nos despedimos
Yo se que quieren más
Pero de lo bueno damos poco
Para así no cansar.


LLAMADA A LA SANTIDAD




1ER ENCUENTRO DEL PERSONAL DE LA INSTITUCIÓN CON LA MADRE PROVINCIAL: MADRE HERMINIA SIERRA




RECORDANDO VIEJOS TIEMPOS

martes, 20 de mayo de 2008

CONOCIENDO A MARIA DEL REFUGIO









SEMANA EUCARISTÍCA MERCEDARIA
AÑO: MARÍA DEL REFUGIO

1.- ¿DONDE NACIÓ MARÍA DEL REFUGIO?
María del Refugio, nació en San Miguel de Allende, Guanajuato,México.
2.- ¿CUÁNDO NACIÓ MARÍA DEL REFUGIO?
el día 21 de septiembre de 1866.
3.- ¿POR QUÉ SE DISTINGUIÓ DESDE PEQUEÑA?
siendo la mayor de ocho hermanos, desde pequeña se distinguió por un gran amor al Santísimo Sacramento y un gran sentido del humor que compartía con sus hermanos.


Aprendió a leer y a escribir, a bordar y cocinar, a hablar francés y a tocar el piano como todas las señoritas de la época colonial de la clase acomodada,
llegada a la edad casadera, por obediencia a su padre contrajo matrimonio con Don Ángel Cancino, un hombre viudo que había llegado hacía poco tiempo a la ciudad como encargado de Hacienda.

Por cuestiones del trabajo de su esposo tuvo que ir a vivir a Morelos junto con su pequeño hijo Ángel, quien enfermó gravemente, sin embargo, al poco tiempo de haber mejorado la salud de su hijo, don Ángel enferma gravemente, dicha enfermedad le costó la vida.

Después de la muerte de su esposo, María del Refugio regresa a vivir con sus padres, sin embargo la vida le da otro duro golpe, pues tras la muerte de éste viene la de su hijo.

Ante tal situación le anima el saber que aún le queda por educar a su pequeña hija Cuquita.

Superando las dificultades por las que pasaba, realiza los ejercicios espirituales de San Ignacio, donde experimenta el llamado de Dios a perfeccionar su vida a ejemplo de Jesucristo, ante tal acontecimiento ella se dedica de lleno a las obras de caridad en la Iglesia, dando un ejemplo de vida a su hija. Así pues, entra a formar parte de la Tercera Orden Franciscana, donde es nombrada maestra de novicias.

En medio de esta realidad no descuida a su hija, pues sabe que ante todo tiene la responsabilidad como madre de educarla, por tal motivo, la lleva a la ciudad de Morelia, donde Cuquita estudia la normal para maestras.

En el colegio donde estudiaba su hija conoce al Padre Vicente María Zaragoza, quien sería un instrumento de quien Dios se serviría para poner en el corazón de María del Refugio el fuego que la habrá de llevar a la fundación de un Instituto de vida Religiosa.

Después de muchas reuniones con el padre y con otras personas que colaborarían, deciden fundar un Instituto de vida consagrada, cuyo fin sea educar a las niñas, pues ella descubre en medio de la sociedad en que vive que muchas jóvenes se pierden al no haber quien las oriente. de este modo el día 21 de marzo de 1910, en que se celebra la encarnación del Hijo de Dios en el seno de María Santísima abre las puertas en la ciudad de México el primer colegio Eucarístico dedicado no a dar sólo una educación fundada en las ciencias, sino una educación que tenga como principio a Cristo, y a Cristo Sacramentado, como lo dice nuestra madre María Teresa, (como se le conocería después a Cuquita) en el discurso inaugural de la primera obra apostólica.

María del Refugio descubre en la educación el medio propicio para extender en el mundo el reinado de Jesús Eucaristía, tal fue y continúa siendo la principal misión del Instituto por ella fundado.

Esta obra nace en medio de las dificultades de una patria que lucha por su libertad, ya que la fecha de fundación coincide con la de la Revolución Mexicana, tiempo de cambio y de conflictos políticos, ante lo cual Refugio responde con un corazón generoso, preparando y regalando alimentos a cientos de personas que a diario acudían a las puertas del colegio en busca de pan y de protección, además albergó en repetidas ocasiones a familias que huían debido a que se encontraban amenazadas de muerte por causas políticas, fue en este tiempo un ángel de la sociedad, como acostumbraban llamarle en San Miguel de Allende desde su infancia.

Tras esta época, viene otra de mayor sufrimiento y represión a la Iglesia, la persecución religiosa, donde toda la comunidad sucumbe ante las adversidades que dicha persecución suponía, las hermanas debieron continuar con su apostolado y obras de caridad a escondidas, dando clases en los sótanos, carentes muchas veces de las cosas materiales más indispensables, pues se perdió la libertad de culto y fueron cerrados cientos de Templos católicos.

María del Refugio, en medio de tantas dificultades sabe ser para cada una de las hermanas una madre amorosa que busca protegerlas del enemigo, es de esta forma en que se ve obligada a separase de las hijas que había acogido en su instituto enviándolas al extranjero para protegerlas de los males que les rodeaban en el país.

En medio de estas penas y dificultades, Refugio descubre la protección amorosa de Jesús Eucaristía, y ante la cercanía y apoyo del Padre Alfredo Scotti de la Orden de la Merced, ella encuentra la presencia viva de María Santísima de la Merced en su obra y apostolado, razón por la cual decide que el Instituto por ella fundada acoja también esta gracia que la llevará a llamarse mercedaria.

Después de todas las obras realizadas y de una vida consagrada por entero a Dios y a sus hermanos, María del Refugio muere el día 24 de abril de 1937 en que llena de gozo retorna al padre que la creo.

Sin embargo su espíritu sigue vivo en cada hermana que decide unirse a ese Instituto de Hermanas Mercedarias del Santísimo Sacramento para continuar haciendo vida el carisma y misión por ella iniciado.

Oración por la glorificación de la Sierva de Dios María del Refugio

¡Oh Padre celestial! dígnate concedernos La gracia insigne de ver elevada al honor de los altares a tu sierva María del Refugio, quien para corresponder a los anhelos de su corazón, fundó esta Congregación, destinada a difundir el amor al Santísimo Sacramento mediante la educación cristiana de la niñez y la juventud. Concédenos por su intercesión la gracia que te pedimos… (Se hace la petición). Te lo rogamos, por tu Hijo Nuestro Señor Jesucristo. Así sea.

lunes, 19 de mayo de 2008

APERTURA DE LA SEMANA EUCARISTICA MERCEDARIA








Pensamientos y Consejos de María del Refugio Aguilar y Torres

1.No hay obra más bella y más meritoria a los ojos de Dios que la que se consagra a la formación de la niñez.

2.Educados el entendimiento y la voluntad, queda educada toda el alma; pero es necesario educar todo el cuerpo.

3.No améis con corazón humano, amad con el corazón de Cristo, poned en todas vuestras acciones ese sello Divino.

4.La Eucaristía y la niñez, la Eucaristía y la juventud debe ser nuestro lema y el encanto de nuestro corazón.

5.Dios nuestro Señor, hará que en sus corazones germine siempre la flor de la gratitud que es tan hermosa.

6.Hijas mías: no echéis en el olvido lo que con tanto trabajo se ha sembrado en vuestras almas.

7.Procurad honrar a vuestros padres, cumplid vuestros deberes, tened carácter y honor en todas vuestras acciones.

8.Nunca cometáis una acción que os avergüence ante Dios y ante vuestros Padres.
9. Si hemos logrado imprimir si quiera un buen sentimiento en el corazón de los niños daremos por bien empleado nuestros afanes.

10.Si hemos grabado una buena inclinación, si hemos alcanzado evitar una ofensa a Dios daremos por bien empleados nuestros afanes.

11.Hijas mías: Que el Niño Jesús las haga perfectas imitadoras suyas.

12.Cuánta necesidad hay de que los niños en sus primeros años aprendan a amar y servir fielmente al Señor.

13.Quiera el cielo, oh padre de familia, que a su tiempo recojáis el fruto del grano que con tanto amor hemos sembrado en el corazón de vuestros hijos.

14.Hijas mías: procuren no sólo instruir su inteligencia sino muy especialmente llenar de hermosas flores su corazón.

15.Vuestro amor a Dios debe ser un constante “sí” a la voluntad Divina.

16.Hagan todo por amor, nada por la fuerza sino por la fuerza del amor.

17.Hijas mías, no vinieron a ser buenas, sino santas.

18.El corazón de la religiosa debe estar siempre limpio de todo rencor, orgullo y vanidad porque es la morada de Jesús.

19.Dios, sólo todo lo demás es secundario

20.Hijas mías: vivid siempre en la presencia del Señor

21.Hijas mías: Esforcémonos por progresar cada día en la perfección a la cual nos llama Dios.

22.Hay que poner toda nuestra confianza en Dios y seguir adelante sin arredrarnos ante las dificultades.

23.Ven, Jesús, mi Jesús dame paciencia y en las contrariedades dame prudencia.

24.El que lleva a Jesús en el corazón, lleva un paraíso en la tierra.

25.Todo lo que hagamos es poco, para agradecer a nuestro buen Jesús, el haberse querido quedar con nosotros hasta la consumación de los siglos.

26.Qué triste sería nuestra vida, si no tuviéramos la esperanza de la vida futura y gozar de Dios eternamente.

27.Somos soldados de Cristo y seremos vencidas si dejamos de pelear.

28.La santa misa es el sacrificio supremo y no deberíamos distraernos cuando asistimos e él.

29.A la sombra del sagrario nada nos faltará.

30.Todo lo que se hace para dar gusto a Dios y en su Divina presencia, todo tiene que salir bien.

31.Jesús Sacramentado sea siempre el encanto de nuestro corazón.

32.Dios nos escogió para su servicio, de Él debemos esperarlo todo.

33.Amemos a Jesús con todo nuestro corazón a costa de sacrificios y penurias.

34.Todo sufrimiento que se pasa en esta vida, resignándose a la voluntad de Dios tendrá su recompensa.

35.Si no fuera por la esperanza en el sufrimiento y en el dolor que termina en esta vida para gozar después de la otra, qué triste sería nuestra vida.

36.El dolor no deforma, transforma.

37.Su mirada deben llevarla siempre hacia el cielo y no al suelo.

38.A Nuestro Señor no le gusta el corazón partido, hay que dárselo todo entero.

39.Con el fiel cumplimiento de nuestros deberes diarios debemos ganarnos el cielo.

40.Sólo a Dios toca juzgar, a nosotras no, pues no sabemos las intenciones con que haya obrado aquella persona.

41.No terminen nunca una clase, por árida que sea, sin hablarles de Nuestro Señor y de la bondad de su corazón.

42.Hermana: vea que son almitas, que usted tiene en sus manos y que de ellas dará cuenta a Nuestro Señor.

43.Amen mucho a Nuestro Señor y a la Santísima Virgen, para que las haga siempre puras, humildes y sencillas.

44.Hijas, al recitar el Gloria Patri, no dejen nunca de inclinar la cabeza en señal de veneración a las tres augustas personas de la Santísima Trinidad.

45.Yo siempre pido al Señor que mis hijas sean fieles a él y tengan entre ellas caridad.

46.Señor, ¡yo toda tuya, tu todo mío! Eternamente tuya, eternamente mío!

47.Grande tristeza me da diciéndome que allí las niñas pagan poco, hay que buscar almas y no dinero.

48.Sé que Jesús está en la Hostia consagrada y desde aquí lo adoro.

49.Al venir a mi pecho, Jesús bueno, de tu vida de amor lo encuentres lleno.

50.Ven Jesús, mi Jesús, quiero decirte que a cada instante anhelo recibirte.

51.Hay que evitar todo lo que escandalice a las niñas. Como dice el evangelio: «Colgarse una piedra de molino y echarse al mar antes que escandalizarlos»..

52.Cuando yo muera, no dejen de pedir por mi alma: “No vayan a decir: Era tan buena”.

53.Señor te entrego la Comunidad que tú me confiaste, es obra tuya, ha sido fundada para darte gloria.

54.¿Es la voluntad de Dios que quiere esto? Hay que aceptarlo.

55.Debemos tener solamente lo necesario e indispensable para nuestro servicio y no con lujo.

56.El oratorio que llevo en mi corazón, ese sí no lo podrán cerrar”.

57.Confiemos siempre en Dios, en medio de las dificultades y problemas, sólo de Él nos vendrá la fuerza y el remedio.

58.Hay que vigilar que los maestros seglares en nuestros colegios, procuren moralizar a las niñas y que no introduzcan ideologías que dañen su fe y su moral.

59.Por nosotras mismas todo perderíamos, pero gracias a la Pasión y muerte de Nuestro Señor Jesucristo, llegaremos al Cielo.

60.Hay que vigilar siempre a las niñas, pues podrían perder la inocencia, qué dolor si por nuestra pereza y descuido la perdieran.

61.Sigamos siempre adelante, pues hasta la menor cosa que hagamos en la casa de Dios, tendrá gran valor para la vida eterna.

62.Hay que pedir a Dios por las vocaciones sacerdotales y para que nos envíe vocaciones buenas y santas para su servicio.

63.La austeridad de la vida religiosa hay que sobrellevarla, hijas mías, por amor a Dios y servirle con fidelidad.

64.Sigamos adelante llevando nuestra cruz, pues todo lo que hagamos en la casa del Señor, hasta levantar un alfiler, tendrá grande recompensa en la otra vida.

65.Hay que luchar y sufrir hasta vencer en todas las tempestades que nos levantan el demonio o las criaturas.

66.Hijas mías, soporten siempre con buen ánimo y hasta con alegría las contrariedades de la vida.

67.Hijas mías, con espíritu sereno y en unión con Dios, debemos soportar diariamente lo que El nos envía para nuestra santificación.

68.Hijas mías, por amor a la santa pobreza, deben cuidar las escobas, los libros y cuanto tengan para su uso y servicio.

69.Hijas mías, por amor a la santa pobreza no desperdicien flores, ni vino, ni aceite y tengan siempre todo limpio.

70.Dios es el primero y el último a quien debemos agradar, hay que amarlo.

71.Hijas mías: la oración sea siempre nuestra arma contra el demonio.

72.La salvación de los niños es uno de los intereses del corazón de Jesús. Este está confiado a nosotros. Debemos trabajar por la salvación de los niños: con el ejemplo, con la palabra, con la oración. La condenación de un alma es un triunfo del diablo y un eterno enemigo de Dios en el infierno y un soldado menos en las filas cristianas.
PALABRAS DE LA DIRECTORA DE LA INSTITUCIÓN
MGS. MILAGROS BARRERA

domingo, 18 de mayo de 2008

EL EVANGELIO DEL DIA


Evangelio según San Juan 3,16-18.


Sí, Dios amó tanto al mundo, que entregó a su Hijo único para que todo el que cree en él no muera, sino que tenga Vida eterna. Porque Dios no envió a su Hijo para juzgar al mundo, sino para que el mundo se salve por él. El que cree en él, no es condenado; el que no cree, ya está condenado, porque no ha creído en el nombre del Hijo único de Dios.


PALABRA DEL SEÑOR